miércoles, 24 de febrero de 2010

EL PASEO MATINAL


Ella piensa que él no sufre en esta vida, por que ni come,
ni duerme, ni trabaja. Siempre esta igual por que es un maniquí.
Sin émbargo, a ella le ocurre todo lo contrario,
pasa muchas necesidades
porque es una mendiga.Todos los días se dirige a buscar trabajo o a un albergue para comer.Una mañana miró el escaparate
y se dio cuenta que el maniquí no estaba.
Se le cayeron dos lágrimas y
la tristeza se reflejó en su cara, porque poco a poco, sin darse cuenta,
se había enamorado del maniquí y con tan solo verlo, se sentía feliz.
Al doblar la esquina se encontró con el maniquí, había cobrado vida. Ella se puso muy contenta y al verse, los dos se abrazarón.
El maniquí le dijo:
- No te preocupes, pues no vas a pasar mas necesidades mientras que estés conmigo.
Al poco tiempo los dos se casaron y vivieron muy felices.

lunes, 22 de febrero de 2010

REINA POR UNA SEMANA


El sábado fui de compras al carrefour.
Estaba lleno de gente y por curiosidad me acerqué
a ver que pasaba. Era un sorteo cuyo premio
era ser reina por una semana.
Yo como soy tan caldeosa, me apunté en el sorteo y con un poco de suerte, me nombraron reina.
Me puse tan contenta, que ni yo me lo creía.
Me pusieron la corona,me dieron un cheque para que me comprara lo
que yo quisiera. Me llevaron hasta la puerta para enseñarme la limosina, con chófer incluido,
para que me llevara a donde yo le dijera. Además durante esa semana viviría en un castillo.
Yo estaba alucinando pero también tenia las obligaciones de una reina.
Enseguida me puse a trabajar, era un poco difícil pero aprendí rápido.
Lo que mas me gustaba era la noche, me tenía que vestir de gala para la cena.
Después de la cena, el baile era fantástico. Hasta que llegó el ultimo día y
tenía que abandonarlo todo. Se me acabó la semana para ser reina pero disfruté
mucho y volvería a ser reina por otra semana.

sábado, 6 de febrero de 2010

LA TRAMA,EL NUDO ( RELATO HUMORÍSTICO )


Mi cuñada Sonia me llama para pasar
el día en la playa. Me encantó la idea. Nos hacía
falta un día de relajación y ponernos morenitas.
Al mediodía nos fuimos al chiringuito para comer.Nos pedimos
marisco. Nos pusieron una centolla grandecita ¡No veas para partir las
patas! Nos dieron un cascanueces para abrirlas.
Empecé a partir una,se me resbaló y la pata le cayó a un hombre en su
plato. Mi cuñada empezó a reírse y yo también,pero el hombre estaba mosqueado.
Me levanté y le pedí perdón. Después de comer nos fuimos a tomar el sol,
Sonia me dijo:
- Vamos a darnos un refrescón.
- Venga,vale.
Fuimos corriendo porque quemaba la arena.Me caí todo el mundo acabó riéndose
y yo muerta de vergüenza...
Despuies nos fuimos al hotel y luego quedamos para dar una vuelta por el pueblo.
Al siguiente día nos marchamos. ¡Qué bien nos lo habíamos pasado!
El año que viene repetimos mi cuñada Sonia y yo.